Resumen de la presentación de Diego Rivera (a) y Concepción Obón (b) en en el 9º Congreso de Fitoterapia de la SEFIT (Menorca 18-21 de Mayo de 2017)
a Universidad de Murcia. b Universidad Miguel Hernández de Elche.
La Manzanilla de Mahón según el Real Decreto 3176/1983 (BOE, 28 diciembre 1983) es la especie vegetal para infusión Santolina chamaecyparissus de uso en alimentación contemplado en este reglamento. Bajo S. chamaecyparissus se incluye un agregado de especies que presentan usos muy similares.
No aparece entre las 117 monografías publicadas por Organización Mundial de la Salud (Monographs on Selected Medicinal Plants), desde 1999 (vol 1) hasta 2009 (vol 4). Tampoco aparece su monografía en ESCOP, ni en la lista de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), la Farmacopea Europea, o la Farmacopea española en sus diversas ediciones. En 2016 se incluye en la Pharmacopée Française dentro de la Liste A des Plantes Médicinales Utilisées Traditionnellement.
Santolina chamaeyparissus aggr., se extiende por la Península Ibérica, el mediodía de Francia y las Baleares, ha sido y es empleada en la mayoría de las zonas donde crece, aunque actualmente ha decaído su consumo debido al despoblamiento rural. Se han recogido cerca de 50 nombres en castellano y algo más de 50 en catalán.
Se ha empleado en licorería sobre todo en Cataluña, Baleares y Comunidad Valenciana que son las zonas de España con mayor tradición de licores de hierbas. En cuanto a su uso medicinal predomina su consumo para problemas del sistema digestivo entre ellos, después de las comidas sobre todo en Baleares y Comunidad Valenciana. El sabor es algo amargo algo que se aprecia en estas zonas. También se toma para la acidez de estómago, como hepatoprotector, para empachos, y problemas en la boca. Otros usos medicinales son para gripes y resfriados, garganta, tos y descongestionante nasal. Para el sistema genito-urinario se empleaba para desarreglos menstruales en forma de infusión, infecciones vaginales (baños de asiento) o como diurético. En cuanto a usos externos se hacen infusiones o bien macerados en alcohol para realizar friegas en zonas doloridas.
Es frecuente su empleo en mezclas con otras especies. Siempre la parte usada son las inflorescencias (los capítulos o cabezuelas), aunque en ocasiones se añaden tallos y hojas (toda la parte aérea).